Las manos sudorosas y la mirada inquieta, así estaban la
mayoría de los poco más de 300 estudiantes de noveno grado que decidieron optar
por ingresar el próximo curso escolar al Instituto Pre Vocacional de Ciencias
Exactas (IPVCE) “Luis Urquiza Jorge” de Las Tunas.
Son muchachos que están cerrando los tres exámenes de ingreso necesarios para emprender el camino
(Matemáticas, Español e Historia de Cuba) y, aunque saben que las cerca de 160
plazas que otorga el centro no alcanzan para todos los aspirantes, dispersos en
los ocho municipios de la provincia, mientras sudan, esperan.
Algunos, al
ritmo de su tiempo, lo hacen prendidos de sus celulares, otros, dando la mano a
sus familiares, igual de nerviosos y están los que consultan con los amigos de
sueños alguna duda de último minuto y les escucho decir de la «Revolución del
30, la que se fue a bolina, y de esto que es importante en la comunidad
primitiva cubana, allá por 1492… » Y sonrío.
Me siento un poco como pez en el agua, recuerdo también
mis ardores de estudiante y mis muchos sueños pendientes de aquella época
cuando vestía uniforme de secundaria y todo giraba y giraba lleno de cosas por
hacer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario